La fiesta mágica del día de San Juan (I)
por Carlos García
Tras la finalización de las fiestas de mayo y entrada ya la plena estación veraniega, aparece en el calendario la festividad de San Juan Bautista, que tiene como principal característica la costumbre de encender hogueras. Se trata, sin duda, de una fiesta con ceremonia muy antigua de ritos de fecundidad y vegetación dotada de elementos cristianizados. Estas celebraciones ya se realizaban durante el solsticio de verano en los países musulmanes y están vinculadas al culto solar, siendo anteriores al advenimiento del cristianismo, quién, posteriormente la instaura con el fin de hacer desaparecer su conformación pagana. Es éste día cuando el sol se aparta mas en el signo de Cáncer, y éstos condicionantes son los que hacen también que se le conozca como Fiesta del Sol.
Iglesia de San Juan en La Laguna (Tenerife) |
Son éstas hogueras muy antiguas en Canarias y se utilizan no solo en la festividad de San Juan sino en la de San Antonio y San Pedro. Por información de Jiménez Sánchez conocemos que, en una cita existente en el archivo de la iglesia parroquial de San Juan Bautista de la ciudad de Telde, se lee:”…en 1544 la cofradía de la Hermandad de San Juan, acordaron pagar a los esclavos negros para llevar leña para las fogaleras de la noche de San Juan…” La Fiesta de San Juan estambién celebrada en otros lugares, debiendo el auge experimentado desde la Edad Media, a que la devoción proviene tanto del cristianismo como del mundo musulmán, por creer éstos que el santo había sido moro:
El día de San Juan
es día de alegría
hacen fiesta los cristianos
y los moros de morería.
La mañana de San Juan
a punto que alboreaba
grande fiesta hacen los moros
en la Vega de Granada…
Mañanita de San Juan
como costumbre que fuera
las damas y los galanes
a bañarse a las Arenas…
Mañanita, mañanita
mañanita de San Juan
fue a dar agua a su caballo
a la orilla de la mar….
El fuego de las hogueras.- El fuego siempre ha sido considerado como un elemento mágico, uno de los mas importantes para dominar “los poderes maléficos”, habiéndose usado, como dice Frazer en La Rama Dorada, contra la magia negra y las brujerías, así como contra las enfermedades o desgracias.
fuego del señor San Juan
la que no se salte el fuego
soltera se quedará (La flor de la marañuela. Juandel Río Ayala).
Salto por San Juan
salto por San Pedro
para que me abran
las puertas del cielo.
La bruja por esta noche
no tendrá en que cabalgar
que le quemaron la escoba
que barría en el pajar.
(La flor de la marañuela)
Hachitos de Las Canales (Icod) |
No hay que olvidar que existen también en Canarias otras manifestaciones con el fuego como protagonista. Es éste el caso de los “Hachitos de San Juan” que se celebran en Icod de los Vinos, en donde con antorchas o hachos, hoy de petróleo y antes de tea, iluminan bajando las lomas desde la Vega hasta el Amparo, y en el que se baila, a ritmo de tajaraste, mezclas de la danza y el baile corrido. También en Garachico se celebra la noche con carozos encendidos que alumbran toda la montaña, o se tiran los “Fuegos del Risco” desde el Mazapé, en San Juan de la Rambla, haciendo rodar bolas de fuego montaña abajo.
Tiene San Juan un arraigo especial en el pueblo canario, tanto en su aspecto religioso como popular, viniendo expresado éste sentimiento por distintas manifestaciones que lo demuestran:
Viene mayo con sus flores
San Juan con sus clavellinas
y San Juan es el mejor
de bautizar al Señor
Hasta San Juan no te bañes
que te hace daño el agua.
Es costumbre, desde muy antiguo, que la gente iba al mar a darse un baño con el fin de poder llegar vivos hasta el año siguiente o para preservarse de enfermedades. Es difícil conocer de donde deriva originalmente ésta práctica, pero es de suponer que está ligada íntimamente con la superstición de la purificación de los baños rituales en diversas ceremonias y evidentemente interrelacionadas con la salud. El agua siempre es símbolo purificador y de vida. Y no solo era preceptivo de las personas sino también extensivo a los animales, costumbre por otra parte difundida a otros lugares geográficos de nuestro Estado, remontándose en nuestro entorno a la época aborigen guanche en que se acudía con los rebaños a la orilla del mar. Años atrás se realizaban auténticas romerías con instrumentos y parrandas a la orilla del mar en la madrugada de San Juan:
En la mañana de San Juan
cuando la gente madruga
Yo vide bailar el sol
NOTA: La fotografía de los Hachitos de Las Canales es de
Francisco Javier Toledo Ravelo (Licencia Creative Commons)